¿Quieres saber qué buenas prácticas puedes aplicar para mantener en buen estado tu fosa séptica durante más tiempo?
Menos agua para tu fosa séptica
Tratar de ahorrar agua es una buena forma de preservar la salud de tu fosa. Ten en cuenta que cada gota de agua que sale de tu desagüe acaba allí, por lo tanto es importante tener cuidado con la cantidad que utilizamos cada día para no acelerar su proceso de deterioro. Al ahorrar agua, además de ahorrar dinero estarás contribuyendo a mejorar el medio ambiente por lo que con este sencillo paso ganamos todos. Notarás que tu fosa requiere un menor mantenimiento y no da tantos problemas, al tener que procesar mucha menos agua.
No arrojes desechos por tu desagüe
Todo el agua de tu hogar llega hasta la fosa, pero también lo hace todo aquello que dejas ir por tu desagüe. Presta atención y trata de no arrojar restos de alimentos, aceite, pinturas, disolventes, cabello, etc. Además de que tus tuberías sufrirán y es muy posible que se acabe produciendo un importante atasco, todo eso irá a parar a tu fosa. Esta acumulación de materiales puede hacer mucho daño a tu fosa y reducir su vida útil rápidamente.
Cuidado con los detergentes
Muy relacionado con el punto anterior esta la mezcla de detergentes, jabones y otros químicos con el agua. Aunque nos parezcan materiales seguros pueden afectar en gran medida a nuestra fosa y sobre todo a los microorganismos que viven en ella, encargados de descomponer los restos que llegan unidos al agua.
Atascos producidos por toallitas
Otro producto que debes evitar arrojar por tu desagüe son las toallitas húmedas no degradables. Aunque pienses que pueden arrojarse sin problema por el inodoro, al igual que el papel higiénico, esto no es así. Posiblemente acabarán produciendo un atasco en tus tuberías o en tu fosa así que presta atención a estos pequeños detalles para evitarlo.