Las fosas sépticas suelen ser muy similares en su interior, a pesar de que su material exterior pueda variar. Es importante que cuenten con una serie de partes básicas para que puedan cumplir su función correctamente. En una fosa séptica es habitual encontrar las siguientes partes:

• Acceso para poder inspeccionarla
• Una tubería de entrada y otra de salida
• Un tubo de aireación
• Un deflector

Además de estas partes básicas en la estructura de la fosa séptica, también es posible encontrar otra serie de elementos y sistemas que propician su correcto funcionamiento.

• Trampa para grasas
• Tanque séptico
• Filtro de efluente
• Sistema de infiltración

Gracias a estos sistemas, dentro de la fosa se puede llevar a cabo esta separación de grasas, partículas sólidas que acaban pasando a ser lodo y agua residual. Por eso, aunque desde fuera parezca simplemente un tanque en el que se acumulan las aguas sucias del hogar, el proceso que se produce en su interior es mucho más complejo de lo que parece. Por eso te recomendamos que, tanto al realizar la instalación de la fosa como a la hora de llevar a cabo su limpieza, contactes con una empresa profesional que sea capaz de ofrecerte todas las garantías necesarias como Saneamientos Mungia.