¿Alguna vez te has planteado qué puedes hacer para mejorar el estado de tus tuberías? ¿Qué consejos puedes poner en práctica para evitar que se atasquen tan a menudo? Aquí te dejamos algunas prácticas que puedes comenzar a implementar en tu día a día para evitar que se atasquen tan a menudo.
En primer lugar, trata de huir de los productos químicos para desatascos. Aunque prometan estupendos resultados, tus tuberías pueden sufrir con un uso excesivo de estos productos. Muchos de ellos, al ser tan agresivos, terminan por corroer las paredes de las tuberías provocando filtraciones.
Te recomendamos también que reduzcas la presión de tus grifos. Es cierto que tener una buena presión en tus grifos es algo importante, sin embargo una presión demasiado alta puede provocar daños en tu sistema de saneamiento.
Por otro lado, si vives en una zona de aguas duras te aconsejamos que coloques un sistema para ablandar el agua. La acumulación de cal también provoca daños significativos en la estructura de nuestro sistema de tuberías y puede provocar grandes a largo plazo.
Otro consejo, bien conocido por todos, es evitar verter aceite o grasa por el desagüe. Si no lo sabías, esto es un error muy grave que puede provocar grandes atascos en tus tuberías. También te recomendamos que coloques un filtro encima del desagüe para atrapar cualquier resto de comida que pueda colarse al lavar los platos.