Cómo recoger el agua de la lluvia

Si en otras entradas detallamos todas las claves sobre procesos de aprovechamiento de agua como el riego por goteo, en esta ocasión nuestra empresa de desatascos en Bilbao explica cómo recoger el agua de lluvia. Y es que hoy, más que nunca, es necesario disponer de sistemas que favorezcan la reducción del consumo de este elemento de vital importancia para la vida en nuestro planeta. 

Elementos necesarios para recoger y aprovechar el agua de lluvia

Para aprovechar el agua de lluvia podemos recurrir a diferentes “fuentes” de recogida. Un claro ejemplo son las cubiertas de edificios, tejados y canalones de viviendas, desde las que se puede canalizar, filtrar y almacenar el agua para usos posteriores. 

¿Qué sistemas de captación de agua de lluvia existen? 

Si bien existen diferentes sistemas de captación de agua, todos ellos cuentan con unos elementos comunes.

Zona de captación

Como hemos avanzado, generalmente son cubiertas y tejados de viviendas las zonas desde las que aprovecharemos el agua de lluvia. Eso sí, hablamos de estructuras que no solo deben estar libres de impermeabilizantes artificiales y otros compuestos nocivos: también han de ser inocuas. De lo contrario, la composición del agua quedará afectada. 

Sistema de conducción

Para canalizar el agua de lluvia es necesario dirigir el torrente hacia un depósito donde posteriormente quedará almacenada a través de sistemas de conducción. Para ello, se aprovecha la propia inclinación del tejado o el diseño de los canalones. Lo ideal es que los sistemas de conducción estén compuestos por canaletas de lámina galvanizada, tuberías y accesorios fabricados con PVC, que conducirán el agua de lluvia hasta su almacenamiento, evitando que el agua captada se pierda. 

Filtros y trampas de sólidos

Si bien el agua de lluvia es de gran calidad, puede transportar impurezas que deben eliminarse para su posterior reutilización. Para “purificarla”, el mercado pone a disposición de los usuarios diferentes productos filtrantes muy eficaces que incluso consiguen potabilizarla, así como trampas de sólidos y filtros de hojas y ramas que impiden la obstrucción del sistema de conducción. 

Depósitos

El depósito es el elemento donde se va a almacenar el agua recolectada. Suelen estar fabricados con materiales que favorecen la conservación del agua, como pueden ser los plásticos acondicionados o los tanques metálicos.

 

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