Cuando sufrimos un atasco en el plato de ducha de nuestro baño es mucho más urgente desatascarlo que cuando se produce en otros desagües como el de la bañera, lavabo o cocina. El motivo es que muchos platos de las duchas tienden a ser planos por lo que es mucho más fácil que se acumule el agua y podría llegar a salirse si quedan huecos en nuestra mampara.
¿Cómo desatascar eficazmente un plato de ducha?
Lo primero que puedes intentar es utilizar un desatascador manual. Sin embargo, dependiendo del grosor del tapón que se haya generado te resultará más o menos fácil extraerlo. Dentro de esta opción puedes optar por un desatascador tradicional de ventosa, por uno de muelle o por un desatascador neumático. También puedes optar por extraer la tapa del desagüe y retirar todos los restos que puedas y posteriormente desatascar el resto con un desatascador manual, esto te facilitará mucho más la tarea.
Si aún continuas sin conseguir desatascar del todo el desagüe, prueba un desatascador químico. Habitualmente su forma de uso es verter el líquido en el desagüe y dejarlo reposar durante toda la noche. A la mañana siguiente vierte agua caliente y conseguir que el tapón se disuelva. Si en este caso continuas sin poder deshacerte de todo el tapón por completo, consulta con una empresa de desatascos para que te ayude. Así te asegurarás de no dañar tus tuberías empleando otros métodos más agresivos.
Recuerda que si realizas una limpieza periódica del desagüe será más complicado que se produzca un atasco de este tipo.