¿Sabías que en algunos países se reutilizan las aguas negras para los cultivos agrícolas?
En otras entradas hemos hablado de las aguas negras o aguas residuales, cómo se generan y cómo se tratan pero en esta ocasión nos vamos a centrar en la utilidad que les dan en algunos lugares del mundo. Este tipo de aguas que se vierten por el inodoro son empleadas en algunos países para regar las cosechas agrícolas. Las ventajas que tiene este agua es que al contener materia orgánica incrementa la productividad agrícola y permite que los agricultores puedan prescindir de abonar sus campos. Sin embargo, tiene varios puntos negativos.
Al contener patógenos los agricultores que las utilizan pueden contraer enfermedades, al igual que las personas que consumen los productos regados con esta clase de agua. Al mismo tiempo, verter estas aguas directamente a la tierra contribuye a la contaminación de los acuíferos. Además, este tipo de agua puede contener detergentes, grasa, restos de fármacos como antibióticos, metales pesados, etc. que acaban filtrándose a la tierra.
Por estos motivos en muchos lugares se prefiere tratar las aguas residuales antes de volver a emplearlas en riego. Esto además de eliminar todas las sustancias contaminantes, también permite que se ajusten los nutrientes a las necesidades de los cultivos.