Fosas sépticas, diferentes tipos
Las fosas sépticas son instaladas desde hace muchos años, sin embargo con el paso de tiempo los modelos han ido evolucionando. Estos nuevos modelos surgen como respuesta a las necesidades de los diferentes usuarios. En otras entradas de nuestro blog te hemos contado cómo se instala una fosa, cómo debe ser su mantenimiento y anulación. En esta ocasión te contamos las diferentes clases que existen.
¿Qué tipos de fosas sépticas existen?
- Realizadas en hormigón. Es la más habitual ya que tiene gran resistencia. Cuentan con dos compartimentos donde se produce el proceso de separación de residuos, separando los elementos líquidos de los sólidos.
- Prefabricadas. Son empleadas para usos temporales antes de que se produzca la instalación del alcantarillado definitivo. Suelen estar realizadas en plástico o fibra de vidrio y se caracterizan por ser muy ligeras. Son más económicas y su instalación es mucho más sencilla.
- Compactas. Normalmente realizadas en polietileno de alta densidad. Es habitual que incorporen un filtro biológico aeróbico que permite tratar estas aguas residuales.
- Fosa de acumulación. Esta clase no vierte el agua filtrada a la tierra por lo que debe ser limpiada más a menudo por una empresa especializada. Estas fosas pueden estar realizadas tanto en plástico como en hormigón.